Y San Isidro obró el milagro: Premio al Vendedor del Año 2014

Por fin nos llegó el mensaje del Kickoff 2014 sobre cuidar mejor a las personas y ofrecerles más planes de carrera, mejores condiciones y cuidar el talento. Y aunque hay cierta inercia en los mandos intermedios con látigo del 2013 (mas en Miguel Yuste, no tanto en Josefa Valcárcel), parece que por fin está llegando ese mensaje a los mandos intermedios.

Hemos leído como agua de Mayo el comunicado del 19 de Mayo del Comité Ejecutivo en el que por fin se indica la intención de crecer vendiendo más en vez de reduciendo costes cortando cabezas. Lo cual consideramos que nos devuelve la esperanza para la tranquilidad y que podamos dedicarnos exclusivamente a trabajar y tengamos la mente centrada en nuestro puesto de trabajo, sin otros temores a cosas raras.

Todos queremos que Tecnocom vaya bien y ganemos numerosos proyectos con buenos márgenes.

En dicho comunicado se habla de la situación de cambio de ciclo económico que se percibe y la expectativa de crecimiento económico en España. Y se lanza un programa para incentivar las ventas premiando al Vendedor del año, con hasta un total de 10 premios en metálico.

La iniciativa nos suena a música celestial a nuestros oídos en tanto en cuanto ya no se habla de extinción de contratos, sino que se habla de crecimiento ganando proyectos. Excelente.

Comentábamos hace poco que como lo hemos visto tan negro, cuando ves una flor ya te crees que es primavera.

Es cierto que desde aquí hemos vertido críticas ácidas sobre aquello que nos ha parecido incorrecto, y lo seguiremos haciendo. Pero de la misma manera sabremos valorar y reconocer los que nos parece correcto. Que se empiezan a percibir nuevos aires, es cierto, y es bueno para todos.

Pero un momento, que no nos olvidamos que durante esta pasada crisis han sido los trabajadores, quienes no tenían ninguna responsabilidad  en el origen de la crisis, los que han pagado con creces, de una manera incluso cruel las consecuencias de esta recesión.

El tener a los compañeros con sus condiciones recortadas “voluntariamente” bajo coacciones de si no firmaban iban al paro (ERTE), sin ya incentivos por los que luchar al quitarles el variable (los objetivos han de ser difíciles pero alcanzables), y viviendo cada semana con el temor de ver a quien despiden el próximo viernes, no ha sido nada que ayudase a la productividad.

Confiamos en que no sea demasiado tarde en cuanto al desánimo que se ha respirado estos meses atrás. En las últimas semanas han sido numerosos compañeros que siendo referencias de conocimiento para el resto, se han ido voluntariamente a la competencia porque han llegado a la conclusión (equivocada o no) que Tecnocom no era un lugar al que deseaban ir a trabajar cada mañana al despertar. Y eso es lo mas terrible que nos podía pasar.

Toca ahora centrarnos en la productividad. Bien. Hagamos piña y rememos todos en la misma dirección. Pero eso sí: 

1. No más despidos. 
2. Restitución de las condiciones que bajo coacciones se obligó a firmar a titulo individual a los trabajadores en el 2013 y principios del 2014.
3. Recibamos a los compañeros que vuelven del ERTE en Septiembre devolviendoles a un puesto de trabajo. Sin excepción. Sin discriminación por su edad.
4. El apartado 3.1 del Convenio Colectivo habla de Revisión Salarial. No nos parece apropiado hablar de subidas salariales mientras haya un solo despido o haya compañeros en el ERTE (el paro). Un poco de solidaridad con ellos y propongamos repartir esa masa salarial que resulte entre los compañeros mas necesitados en el ERTE. 
5. Una vez estén recolocados todos los compañeros del ERTE, la apuesta con las nuevas contrataciones ha de ser por un empleo de calidad, por un empleo con derechos, por un empleo con salarios dignos. 
6. Que Tecnocom sea una referencia en la que mirarse las empresas que aspiren a observar el máximo respeto por sus trabajadores y sus derechos. Cosa que no está reñida con maximizar la productividad.

Y concretando en los nuevos aires comunicados en el Kickoff y en el mensaje del Premio al vendedor del 2014, nos parece que es algo bien hecho por el Consejero Delegado, y bien hecho por el Comité Ejecutivo.  Y no nos duelen prendas en reconocerlo.